Cultura cristiana: la Divina Comedia.

1. Resumen.
La Divina Comedia (originalmente sólo Commedia) es un poema escrito por Dante Alighieri. Motor del cambio de mentalidad teocentrista durante el Renacimiento, esta obra es considerada la obra maestra de la literatura italiana y una de las cumbres de la literatura universal. Escrita en toscano, dialecto del italiano, se divide en tres cánticas de 33 cantos cada una que, sumados al introductorio, forman cien: el Infierno, el Purgatorio y el Paraíso. Ninguna de las partes posee una fecha de confección certera, comprendiendo así de 1304 a 1307 u 1308 para el Infierno, de 1307 o 1308 a 1313 o 1314 para el Purgatorio y por último, el Paraíso de 1313 o 1314 a 1321, año de la muerte de Dante.

Dante y su poema, Domenico di Michelino

Estos relatan el descenso del autor a los infiernos como un viaje de autoayuda, de crítica a la sociedad italiana contemporánea: un viaje espiritual en la búsqueda de la purificación. El protagonista, siendo una representación del propio autor, se sumerge en un viaje a los infiernos en un momento de tentación que invade su vida y lo separa del camino recto y se pone a disposición de Virgilio, su guía espiritual, su mentor, su inspiración cuyo trabajo fue el motor principal de la obra de Dante. Es Virgilio quien entonces le dice que le guiará hasta su amada Beatriz, recientemente muerta y el impulso para que Dante idealice su figura como algo puro, buscando salvaguardarla de los pecados del alma humana. Es el auxilio de Beatriz llamada suficiente para que Dante se disponga sin pensárselo a adentrarse en la boca del dominio de Lucifer.

Dante de esta forma se rinde a un autor que le supera, símbolo del bastón de ciego que el poeta necesita para abarcar un tema como es el castigo tras la muerte, no pudiendo hacerlo por mano propia.

Avanzando y a la vez descendiendo por el Infierno empieza a identificar los diferentes anillos que lo conforman y que atribuyen una gravedad a cada pecado. De esta forma descendiendo, hundiéndose en el dolor, en la pesadumbre, es como Dante deja entrever que se siente reflejado en alguno de ellos. Pero sabiendo que su amada le espera nada importa, y continúa por su camino, encontrándose a personalidades de todas las épocas anteriores que localiza en cada anillo como representación del estudio de vida de cada uno de ellos. Son estos los que conversan con Dante para que, a través de su versos, mantenga su recuerdo vivo para años venideros. Tras abandonar el Infierno, llegan al Purgatorio, montaña ascendente y reflejo del cono del Infierno. Consta de siete cornisas, habitadas por pecadores cada vez menores y más redimidos. Ascendiendo por ellas siguen reconociendo a personajes históricos y es antes de llegar al Paraíso cuando Dante ha ido poco a poco expiando sus pecados y se reúne con Beatriz, un alma lo suficientemente pura para que pueda conducirlo. Se despide de esta forma de Virgilio y su amada se convierte en su nueva guía, que le permite acceder a los nueve círculos concéntricos los cuales forman un cielo. En cada uno de ellos se encuentra un planeta, y en el centro se encuentra la Tierra. Consigue Dante por fin ver la luz de Dios, y es esta luz del último cielo la que ofusca a Dante, acabando así la obra.

2. Personajes.

Siendo la Divina Comedia una obra centrada en el viaje y reflexiones del protagonista, nos encontramos como personajes principales a:

• Dante: de 35 años, el alter ego del autor. En la obra está perdido en el plano espiritual y busca purificación, lo que lo lleva a iniciar el viaje rumbo al encuentro de su amada Beatriz.
• Virgilio: poeta y autor de la célebre Eneida. Acompañará y guiará por cada uno de los círculos del infierno y los giros del purgatorio a Dante. Virgilio simboliza la razón, la filosofía, el conocimiento antiguo.

3. Ubicación, características y personajes del Infierno.
De nuevo, como en la Odisea, el Infierno no tiene una ubicación determinada. Incluso más, podríamos decir que todo ocurre en la mente de Dante, el cual se encuentra en una “selva oscura” perdido y asaltado por un león, una pantera y una loba, símbolos de la soberbia, la lujuria y la codicia. Dante se da cuenta de que está cayendo a un profundo lugar donde no da la luz, hasta que Virgilio le rescata y acompaña a la entrada del infierno.

El infierno de Dante se estructura como un cono inverso de 9 anillos o círculos, cada cual habitado por pecadores de mayor calibre y castigo. Antes de esto está la puerta del Infierno y el Vestíbulo, donde los condenados corren eternamente, despreciados tanto por la misericordia como por la justicia. Estas almas no están ni en el Infierno ni fuera de este, pero residen en las orillas del Aqueronte. Su castigo es el de perseguir eternamente una bandera en blanco mientras son atacados por abejas y avispas que continuamente los pican mientras gusanos y otros insectos succionan su sangre y lágrimas. Este castigo se debe a que en vida no fueron capaces de abanderar ninguna causa; ahora deben correr detrás de un estandarte vacío y no por motivación propia, sino por evitar las picaduras de las abejas. Es el Aqueronte el que separa este vestíbulo de aquello que podemos considerar verdaderamente como el Infierno.

El Infierno de Dante y sus zonas

• Primer círculo: hasta aquí han sido enviados aquellos hombres que a pesar de ser virtuosos no han sido bautizados, o que a pesar de su virtud nacieron antes de la primera venida de Jesús. Su castigo consiste precisamente en un deseo incumplido de estar ante la presencia de Dios. Aquí Dante destina a algunos de las más importantes figuras de la historia del pensamiento occidental y cristiano. Entre estos personajes destacan filósofos como Platón, Aristóteles, Sócrates y Séneca; poetas y autores como Ovidio, Horacio y Homero; personajes de la Biblia como Adán, Moisés y Noé; y personalidades romanas como Julio César, Héctor y Bruto. 

• Segundo círculo: este círculo está destinado para los lujuriosos. Y su pena es ser arrastrados por un viento incesante. En este estadio del infierno Dante ubica a reconocidos personajes de Occidente, como Aquiles, Cleopatra, Helena y Paris. 

• Tercer círculo: un poco más abajo encuentran morada aquellos que han sido juzgados por ser golosos. Ellos cumplen con el castigo de permanecer sumergidos en el barro, mientras una lluvia pestilente los moja y son arañados por el perro que cuida el infierno, Cerbero. Aparecen en este anillo Cerbero, Ciacco, Uberti y Jacopo, entre otros. 

• Cuarto círculo: este anillo ha sido destinado para los avaros y pródigos, su pena consiste en formar dos grupos que se empujan y lanzan piedras unos a otros eternamente. Como personajes resaltan Plutón y la Fortuna. 

• Quinto círculo: lugar destinado a los iracundos (condenados a sumergirse en la laguna Estigia, haciéndose daño) y los perezosos (obligados a permanecer hundidos sin poder levantarse). Resaltan como personajes Teseo, las Erinias y Flegias, siendo este último el que más destaca pues Dante le tiene una aversión marcada. 

• Sexto círculo: donde moran los herejes, quienes cumplen la pena de morar en tumbas ardientes. Destacan Cavalcante de Cavalcanti y Farinata degli Uberti, pues ambos conversan con Dante. 

• Séptimo círculo: casa de quienes han ejercido la violencia contra su prójimo y han sido condenados a permanecer sumergidos según el grado de culpa en el río hirviente del Flegetón, siendo el Minotauro el personaje de más importancia. También es hogar de aquellos que han ejercido la violencia contra ellos mismos a través del suicidio (en cuyo caso se condenan a estar convertidos en árboles nudosos que son destrozados eternamente por arpías) y los derrochadores (perseguidos eternamente por perras furiosas), como Lano de Siena. Y no menos importante es que también habitan aquí aquellos que han sido violentos contra Dios (blasfemadores) y la Naturaleza (usureros y sodomitas) quienes son obligados a yacer de formas diferentes en un desierto en donde cae eternamente una lluvia de fuego, como Capaneo o el anciano de Creta (blasfemadores) y Brunetto Latini, además de tres nobles florentinos famosos: Guido Guerra, Tegghiaio Aldobrandi y Jacopo Rusticucci. 

• Octavo círculo: destinado a los rufianes y seductores, quienes cumplen con la pena de correr eternamente en círculos, mientras son golpeados por demonios. Dividido en diez fosos, nos encontramos los siguientes personajes importantes en cada uno. 

- Primer foso: Venedico Caccianimico, Jasón.
- Segundo foso: Alejo Terminelli, Thais.
- Tercer foso: Nicolás III.
- Cuarto foso: Anfiarao, Tiresias, Aronte, Manto, Euripilo, Miguel Scotto, Asdente.
- Quinto foso: Luques, Malabranche, Malacoda, Navarro Ciampolo, Fray Gomita, Miguel Zanche.
- Sexto foso: Catalano, Loderingo, Caifás.
- Séptimo foso: Vanni Fucci, Caco.
- Octavo foso: Ulises, Diomedes y Guido de Montefeltro.
- Noveno foso: Mahoma, Alí, Fray Dolcino, Pedro de Medicina, Curio Mosca, Beltrán del Borno, Geri del Bello.
- Décimo foso: Griffolino, Capocchio, Giani Schicchi, Mirra, Maese Adam, Condes de Romena, la mujer de Putifar, Sinón de Troya.

• Noveno círculo: en este noveno círculo se encuentran en primer lugar los gigantes, quienes son condenados a permanecer inmóviles en un pozo por haber desafiado y traicionado a Dios: Nemrod, Efialto y Anteo. Después, nos encontramos cuatro recintos: Caína, Antenora, Ptolomea y Judesca. 

- Caína: destinada a los traidores a su familia, condenados a estar hundidos en el hielo hasta la cara. Nos encontramos con los condes de Magonza, Sassolo Mascheroni y Camiccione dei Pazzi.
- Antenora: traidores a su nación, entre los que encontramos a Bocca Degli Abati, Buoso di Duera, Tesauro di Beccheria, Giani dei Soldanieri, Ganelón, Tebaldello Zambrasi y el conde Ugolino.
- Ptolomea: traidores a los huéspedes, hundidos en el hielo salvo la cara, como Fray Alberico y Blanca Doria. Judesca: traidores a sus benefactores, distorsionados dentro del hielo, y en donde se encuentran Judas Iscariote, Bruto, Casio. En el centro de este círculo habita Lucifer.